Qué cubre un seguro de coche a terceros ampliado

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En España el seguro de coche más contratado es el seguro a terceros ampliado. El seguro a terceros nos permite disfrutar de una cobertura en caso de que tengamos un accidente contra otros vehículos, conductores o peatones.

Este seguro incluye la responsabilidad civil mínima que exige la ley y, por tanto, no cubre todos los supuestos como robos, hurtos, incendios o rotura de lunas por motivos varios (granizo, golpes de objetos…).

Por esa razón se motiva tanto la adquisición de un seguro ampliado, en el sentido de que amplía la cobertura básica en otros supuestos.

Sin embargo, la cobertura en estos casos no es total, sino que tiene ciertos límites. En su mayoría de casos estos seguros a terceros ampliados presentan las siguientes características.

El primer y segundo año, cobertura total

Prácticamente la totalidad de aseguradoras cubren el primer año todo el valor del vehículo, ya sea por incendio, robo o daños similares. De hecho, la cobertura suele extenderse también durante el segundo año, aunque algunas compañías ya comienzan a aplicar descuentos.

Aquí también hay que diferenciar las aseguradoras que ofrecen una indemnización por valor del coche nuevo y las que la ofrecen por el valor del mercado actual, que siempre tenderá a la baja.

Cobertura porcentual

A partir del tercer año, la mayoría de aseguradoras aplican una cobertura porcentual, que puede suponer el mismo precio del mercado más cierto abono porcentual, un descenso de la indemnización conforme vayan transcurriendo los meses, etc.

Extras del seguro ampliado

La mayor diferencia entre la oferta de un seguro de coche de una compañía y el de otra se encuentra en los extras, valores añadidos con los que atraer a los abonados.

Estos extras son muy variados y abarcan diferente tipo de beneficios. La mayoría de ellas se relaciona con la indemnización en caso de robo y hurto, que suele fijarse entre 500 y 1.000 euros. Otras aseguradoras aplican la cobertura específica a los materiales y objetos dañados o robados. Además, hay que diferenciar los seguros que cubren hurto y robo de los que sólo alguno de estos casos, así como las que también cubren los intentos de robo y hurto que provocan daños en puertas, cerraduras o ventanas.

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