Está bastante claro que el sector asegurador ha evolucionado bastante en los últimos años. Internet es uno de los principales motivos por los que contratar un seguro y aprovechar sus servicios son considerablemente diferentes a como el sector se movía hace unos años.
Uno de los avances más significativos es el de la contratación de tratamientos sanitarios privados de manera individual. En lugar de contratar una póliza general, que sirve para la cobertura de una serie de servicios sanitarios concretos, hasta cierto límite en el gasto, esta propuesta plantea la posibilidad de que el paciente contrate un único tratamiento, pagando por ello lo equivalente a su precio en el global del seguro.
Algunas aseguradoras sanitarias españolas ya han comenzado a sumarse a este sistema de contratación sanitaria. Funciona de la siguiente manera. El usuario hace una búsqueda de un servicio sanitario concreto, que puede contratar a un precio más económico que la póliza en general. El ahorro es considerable para el paciente y el trámite para la aseguradora es suficientemente rentable.
Este tipo de servicio se llama cobertura sanitaria por uso, cuya definición hace referencia al consumo de coberturas sanitarias en función de la necesidad del propio paciente, en lugar de pagar una cobertura sanitaria global que, en el fondo, el usuario espera no volver a utilizar nunca.
Hay una nota negativa o contraproducente en este tipo de servicio y es la rapidez del mismo. Pese a que pueda contratarse un servicio con suficiente antelación como puede ser una consulta de un especialista o incluso una radiografía, la cobertura por urgencias no es viable, dado que se requieren apenas segundos de contratación, que en un momento de tensión como lo puede ser el de una urgencia sanitaria, no lo permite.
En todo caso, la posible solución está en la compatibilidad de servicios entre la póliza de seguro sanitaria general y la cobertura por uso, un sistema híbrido que permitiría aprovechar las ventajas de ambos mundos, lo que conlleva al cliente o paciente suficientes beneficios y un considerable ahorro económico respecto a la propuesta tradicional.
