La telemedicina es un concepto que se valora como potencialmente aplicable desde que surgió Internet. De hecho, en la Red el sector de salud es uno de los que más interés ha suscitado desde hace años.
El concepto de telemedicina no es nuevo, por tanto, consiste en poder realizar un diagnóstico online a través de los medios digitales. Sin embargo, ni Internet, ni la innovación tecnológica, ni el propio sector asegurador habían avanzado conjuntamente lo suficiente como para poder estos servicios. Ahora, sin embargo, parece posible.
La telemedicina en el siglo XXI
La telemedicina actual plantea la posibilidad de realizar diagnósticos online a través de videollamadas. Actualmente esto sería posible desde teléfonos móviles, tablets, ordenadores portátiles o incluso televisiones inteligentes.
En la mayoría de dolencias, un médico responsable de este servicio de telemedicina, que debería estar disponible las 24 horas del día, podría emitir dicho diagnóstico y, también de forma telemática, emitir una receta completamente válida que el paciente o sus responsables (padres y tutores) podrían llevar al momento a una farmacia.
El servicio de diagnóstico apenas duraría unos minutos y en un gran número de casos sería perfectamente aplicable, dado que muchas enfermedades se pueden diagnosticar o tratar con una simple revisión visual.
Los wereables y la telemedicina
Las posibilidades de la telemedicina se amplían todavía más con las posibilidades de aprovechamiento de los wereables, es decir, accesorios inalámbricos conectados a Internet, que pueden ofrecer una monitorización cada vez más avanzada.
Unido a un médico online, el servicio podría superar los límites del diagnóstico visual, con la posibilidad de realizar análisis de presión sanguínea, respiración e incluso otros informes más profundos.
La telemedicina y los seguros
Este servicio de telemedicina se está plasmando cada vez con mayor efectividad en la práctica. Ya no hay tantos límites técnicos y el sector médico está invirtiendo para que sea un servicio rutinario.
El sector asegurador, por su parte, es el que mejor acoge esta innovación tecnológica, ya que puede vincularlo a los diferentes seguros médicos, tanto como asistencia básica como también un valor adicional a los servicios ya existentes.
